Un terremoto de magnitud 7.7 en 1911 golpeó la zona del sureste de Kazajistán. El terremoto desencadenó un enorme deslizamiento de tierra de unos 15 millones de metros cúbicos de roca caliza, formando la forma actual del Lago Kaindy. El lago se caracteriza por su agua cristalina y fría, y un bosque sumergido de árboles Picea schrenkiana. El agua fría ayudó a preservar los troncos, que, aunque han perdido su corteza y ramas, aún sobresalen del agua y se asemejan a los mástiles de barcos hundidos. A los visitantes les gusta bucear en las aguas del lago, pero esta actividad requiere un traje de buceo y equipo debido a la temperatura del agua, que no es adecuada para bucear incluso en verano.

