El Castillo de Frederiksborg es una antigua residencia real, de la época en que el reino era gobernado por Federico II. El castillo fue construido en tres islotes en el lago Slotssøen. El castillo actual es el resultado de la reconstrucción de 1882, ya que el castillo anterior se quemó en 1859. El edificio recibió el propósito de ser el Museo de Historia Nacional. Los visitantes enfatizan especialmente la belleza de la Capilla, el Gran Salón, los parques del palacio y la fuente de Neptuno.