Es imposible describir lo que se puede ver conduciendo 1240 kilómetros de la carretera Carretera Austral hacia la parte sur de Chile. Aquellos que tuvieron suficiente coraje y tiempo informaron que esta es una carretera donde uno aprende a estar agradecido por las pequeñas cosas, como un neumático de repuesto, una milla de buena carretera, o una parada de descanso junto al camino. En el camino a través de la selva, una sonrisa vale más que una billetera llena, haciendo de Chile un hermoso país lleno de muchos amigos.

